PRUEBAS DIAGNÓSTICAS
El Hospital Arruzafa ofrece la posibilidad de llevar a cabo cualquier tipo de prueba de diagnóstico a cualquier paciente con el objeto de realizar una evaluación completa.
La captura de imágenes de autofluorescencia (AF) aporta más información frente a las técnicas de captura de imágenes convencionales, como las fotos del fondo del ojo o la angiografía fluoresceínica, ya que permite la visualización de los cambios metabólicos a nivel del epitelio pigmentario de la retina y ayuda a identificar de forma más incipiente las áreas que pueden correr un mayor riesgo de desarrollo de atrofia geográfica o neurovascularización coroidea.
Durante los últimos años se ha desarrollado una potente tecnología de imagen y diagnóstico que ha revolucionado la práctica clínica y de investigación, especialmente en relación con la salud de la retina. La incorporación de una nueva técnica no invasiva de autofluorescencia supone un gran avance para el estudio de las propiedades fluorescentes de la lipofuscina, que es una mezcla de los pigmentos autofluorescentes que se acumulan en el epitelio pigmentario de la retina como un subproducto de la degradación incompleta de los segmentos exteriores del fotorreceptor.
Este procedimiento es especialmente útil para el estudio precoz de enfermedades como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), ya sea en su tipo atrófica o exudativa, en la coroiditis serosa central, en las enfermedades coriorretinianas inflamatorias dentro del campo de las uveítis posteriores, etc. También es importante para identificar el tipo de distrofia retiniana hereditaria que sufren pacientes, y de esta forma poder precisar el adecuado consejo genético.
Esta técnica evitará en algunos casos el uso de técnicas que requieren el uso de contraste intravenoso para la exploración, con el riesgo que eso conlleva, como es la angiografía fluoresceínica.
La tomografía de coherencia óptica (OCT) es una tecnología no invasiva que está aplicándose en Oftalmología desde hace unos años para el diagnóstico de alteraciones en el polo posterior del ojo (normalmente, a nivel de la mácula), pero en los últimos tiempos ha sido desarrollada también para el diagnóstico de alteraciones del segmento anterior del ojo.
La OCT permite la obtención de imágenes de alta resolución, superior incluso a las obtenidas mediante la biomicroscopía ultrasónica (BMU). Por otra parte, el tiempo en la generación de las imágenes es mucho más rápido con la OCT que con la BMU convencional. Pero la principal ventaja de la OCT frente la BMU radica en que la tomografía es un método de no contacto y que no requiere una posición supina del paciente. Esto permite que la prueba sea mejor tolerada por los pacientes, siendo más confortable que la BMU convencional.
En un centro como Hospital Arruzafa, donde las técnicas de trasplante lamelar de córnea se realizan de forma rutinaria, esta tecnología se ha revelado como fundamental para el control postoperatorio de estos pacientes.
Además, es muy útil para realizar medidas que pueden ser muy importantes a la hora de indicar el implante de una lente en ojo fáquico (para tratar la miopía, el astigmatismo y la hipermetropía) y para el seguimiento de estos implantes.
Por último, la posibilidad de utilizar dicha técnica para el estudio de las estructuras del ángulo esclero-corneal se está revelando como un procedimiento confortable y de gran resolución espacial a este nivel anatómico. La evaluación del ángulo camerular es un elemento fundamental en la exploración de los pacientes glaucomatosos y esta tecnología puede clarificar muchos aspectos relacionados con esta estructura, así como ayudar al diagnóstico y seguimiento de estos pacientes.
En Hospital Arruzafa disponemos del aparato denominado VISANTE, desarrollado por Carl Zeiss y que es pionero en esta tecnología, además de ser el dispositivo con un software más amplio que existe en el mercado. Sus imágenes son de una resolución espectacular y su facilidad de uso hace que sea una tecnología fácilmente aplicable a cualquier paciente.
Disponer del ORA nos permite medir determinados parámetros como la histéresis corneal (CH), la presión intraocular compensada (OIPC) y el factor de resistencia corneal (CRF), que nos ayudan a conocer las propiedades biomecánicas de la córnea de forma medible y repetible.
Las propiedades biomecánicas de la córnea influyen en los resultados de las medidas oculares y considerarlas puede ayudar en el diagnóstico y manejo de algunas enfermedades oculares. Hasta ahora no había sido posible determinar las propiedades biomecánicas del tejido corneal, obligando a los investigadores y oftalmólogos a tomar medidas exclusivamente geométricas de la córnea, como son el espesor y la topografía.
ORBSCAN es un sistema diagnóstico multidimensional que proporciona un análisis completo del sistema corneal del ojo utilizando una técnica de escaneado por hendiduras con un sistema con un sistema de plácido avanzado.
Puede medir la elevación y la curvatura de las superficies anterior y posterior de la córnea (frente a los topógrafos convencionales), la paquimetría corneal completa, la distancia blanco-blanco, la profundidad de la cámara anterior y el ángulo Kappa. Se indica para el diagnóstico y seguimiento de enfermedades corneales, queratoplastias, pre y postoperatorio de cirugía refractiva con láser Excimer, etc…
Son fotografías digitalizadas del fondo ocular que se archivan informáticamente, lo que permite hacer controles comparativos del estado de la retina, coroides y nervio óptico. Es fundamental su uso en el seguimiento de enfermedades como la retinopatía diabética, la degeneración macular asociada a la edad y el glaucoma.
Hospital Arruzafa cuenta para esto con una tecnología innovadora: el OPTOMAP. El examen retiniano con OPTOMAP representa un gran avance tecnológico en el estudio de la retina. Frente a los retinógrafos convencionales disponibles hasta ahora en el mercado, esta tecnología nos permite obtener un estudio panorámico del interior del ojo, analizando de forma digital y con alta resolución hasta 2000 de la retina, una imagen sin precedentes.
También ha abierto una nueva etapa en la realización de angiografías, ya que OPTOMAP supone el primer sistema de angiografía panorámica sin contacto y sin necesidad de dilatación pupilar, visualizar más de un 80 por ciento de la retina de una sola vez, angiofluoresceingrafía dinámica, panorámica y en color sin rojo de altísima definición y evaluación simultánea de la retina periférica y central.
A partir de ahora contar con imágenes (incluida la retina periférica) tomadas en el tiempo nos permitirá evaluarlas, compararlas y así hacer un seguimiento exhaustivo del avance de la patología retiniana.
A diferencia de la luz blanca de máximo espectro utilizada en los dispositivos convencionales, la tecnología de Optos incorpora longitudes de onda láser de baja potencia que realizan el barrido simultáneamente. Ello permite la revisión de las subestructuras retinianas en sus separaciones láser individuales
La angiografía es una técnica de examen consistente en inyectar, en una vena del antebrazo, un colorante (fluoresceína sódica o indiocianina verde) para estudiar y fotografiar la fluorescencia que este produce a su paso por los vasos sanguíneos del ojo (coroides y retina). Para realización de la angiografía es necesario dilatar con colirios la pupila del paciente previamente al examen.
Esta técnica se usa para estudiar enfermedades de la retina y coroides, como la retinopatía diabética, la degeneración macular asociada a la edad, la trombosis y embolias retinianas, la coroiditis, las membranas neovasculares, etc.
El objetivo de esta prueba es valorar el endotelio de la córnea. Está indicada habitualmente en el preoperatorio y seguimiento de implantes de lentes para alta miopía, preoperatorio de cirugía de catarata si se observa una alteración endotelial y en control de distrofias endoteliales.
El objetivo de esta prueba es evaluar la sensibilidad de la retina a los estímulos luminosos para su valoración médica con la ayuda del campímetro computerizado. Se indica sobre todo en el diagnóstico y seguimiento del glaucoma, así como en la valoración y seguimiento de enfermedades neurológicas y alteraciones de las vías de transmisión de los impulsos ópticos.
Esta prueba sirve para la valoración del espesor de la córnea. Su realización se indica básicamente en el preoperatorio y seguimiento de cirugía refractiva corneal y cuando hay sospechas de hipertensión ocular, para valorar si el espesor corneal puede influir en la medida tonométrica.
Contamos con dos métodos de medición de la paquimetría corneal: óptica, que se realiza con el microscopio especular, y ultrasónica, que se realiza con el paquímetro por ultrasonidos.
Biometría ocular:
La biometría ocular es una prueba diagnóstica utilizada para medir las dimensiones anatómicas del globo ocular, nos permite conocer parámetros tales como su longitud axial (distancia entre la parte más anterior y posterior del ojo) o la amplitud de la cámara anterior (espacio comprendido entre la córnea y el iris). Además, también nos permite conocer otras medidas como el grosor del cristalino o la curvatura de la córnea.
Existen dos técnicas con las que podemos realizar una biometría ocular:
• Biometría óptica: Es la más utilizada y emplea luz infrarroja que atraviesa las estructuras oculares para calcular las distancias entre ellas.
• Biometría ultrasónica: funciona con ultrasonidos, los cuales tienen mayor capacidad de penetración que la luz infrarroja. Esta técnica, normalmente es utilizada solo en casos en los que la córnea ha perdido su transparencia, el cristalino está muy opaco ose ha producido una hemorragia severa, lo que impide el paso de la luz infrarroja por las diferentes estructuras oculares.
Esta prueba nos aporta datos fundamentales para el cálculo de la potencia de las lentes intraoculares que se implantan durante la cirugía de cataratas o de lensectomía refractiva.
Con esta prueba valoramos las alteraciones cromáticas congénitas o adquiridas. Para ello utilizamos el Test Farnsworth.
Se realiza en el seguimiento de pacientes con tratamientos en los que los principios activos empleados puedan disminuir la percepción de los colores, y para el diagnóstico cuando hay sospecha de alteraciones congénitas en la percepción de los colores.